La sociedad de la imagen ha venido para quedarse durante una buena cantidad de años, de eso ya no nos podemos ni siquiera atrever a dudar. Hoy, todo lo que sea imagen y contenido multimedia es algo que llama la atención de una manera importante, mientras que lo que implica el texto es aburrimiento y exceso de información. Está claro por lo que tenemos que apostar si queremos, por ejemplo en lo que tiene que ver con la publicidad, llamar la atención de una manera poderosa, eficaz y que responda a los intereses que pretendemos cubrir.
En las empresas que se encargan de suministrar un producto se han tenido que poner manos a la obra con el fin de garantizar esa apuesta por la imagen. Quedarse atrás en este sentido no era una opción, sobre todo porque implicaba perder una enorme visibilidad en un mercado que ya de por sí presenta una competitividad tremenda en los tiempos que corren. Por eso, muchas entidades se han visto obligadas a realizar una inversión sobre todo en lo que tiene que ver con la provisión de las herramientas ideales para un diseño gráfico eficaz.
Diseñar un producto es ya, en efecto, una de las máximas necesidades de las empresas en lo que tiene que ver con la publicitación de sus productos. Todos los estudios indican que, si no se empieza por un diseño de packaging que realmente sea capaz de diferenciar a nuestro producto del del resto, las posibilidades de venderlo caen de una manera realmente importante, pudiendo arrojar unos resultados ciertamente desastrosos. Los profesionales de Empacke, una entidad dedicada a labores como de la que venimos hablando, nos han comentado que evitar ese tipo de situaciones es el motivo por el cual cada vez una cantidad mayor de empresas confían en sus servicios.
Desde luego, a los jóvenes no nos sorprende nada este tipo de situaciones. Pero, ¿os imagináis cómo ha tenido que cambiar la vida para alguien que lleva toda una vida dedicándose a la elaboración de una determinada gama de productos? La verdad es que el cambio para una persona así ha tenido que ser realmente tremendo. La vida no siempre ha sido como lo es ahora y no cabe la menor duda de que adaptarse de una manera rápida a las nuevas necesidades empresariales y sociales es clave para mantener nuestra posición competitiva en el mercado.
Todo el mundo se ha dado cuenta de lo que venimos comentando. Los medios de comunicación, desde luego, así lo aseguran. Un ejemplo de ello es el que tiene que ver con el diario El Plural, que destacaba en una de sus noticias la importancia que ha adquirido un asunto como el packaging en las empresas modernas. Y es que es algo obvio. La imagen todo lo puede. El dicho de «vale más una imagen que mil palabras» está más de moda hoy que en ningún otro momento de la Historia. Y tenemos la sensación de que va a seguir siendo así durante los próximos años.
El packaging español está de enhorabuena
¿Cómo está la situación en lo que respecta al packaging de nuestro país? La verdad es que vive un buen momento en la actualidad, por suerte. Una noticia que fue publicada en la página web del diario La Vanguardia así nos lo hacía saber, indicando que el packaging catalán, por ejemplo, encaraba la llegada del año 2016 con un aumento de la inversión y, sobre todo, con grandes dosis de optimismo. Han pasado tres años desde aquello y la verdad es que ese optimismo se ha transformado en una realidad. Y su estrecha colaboración con el diseño gráfico ha tenido mucho que ver con ello.
De cara a los años que están por venir, es importante seguir por el mismo camino. Dicen que lo que funciona no ha de tocarse y esa es la filosofía que tenemos que tener en estos momentos. Esa y la de seguir cubriendo las necesidades de la sociedad y sus intereses. Si lo hacemos y continuamos apostando por la imagen como principal herramienta de apoyo en materia publicitaria, está más que claro que vamos a seguir siendo los protagonistas de buenos números en materia de venta. Y de eso se trata. En un momento en el que la competencia es tan grande, la verdad es que esto tiene un mérito brutal.
No obstante, no podemos fiarnos. Trabajar para hacer un packaging todavía más atractivo es una obligación para todas las empresas. Solo de esta manera será posible que encontremos las nuevas tendencias y adaptarnos a las mismas para obtener un beneficio. Vivimos en un mundo que gira a veces demasiado deprisa y cualquier relajación puede costar muy cara. Perder nuestro sitio en el mercado es algo que puede suceder de una manera muy sencilla, pero recuperarlo es, desde luego, la tarea más dura que nos pueden asignar.