No sé si es por cosa de las crisis, o porque en esta vida todo tiende a ser cada vez más pequeño, menos los móviles, que cuanto más grandes mejor, pero el caso es que la última moda a la hora de realizar casas es hacerlas pequeñas, bueno mejor dicho, diminutas. Así que ya me estoy viendo llamando a mis amigos de Cubiertas Estévez para que hagan las reformas en el tejado.
Pues lo dicho, aunque suene a broma, o a recortes del famoso Gobierno de Mariano Rajoy, la moda es hacer las casas pequeñas. Y es que si las ves de lejos parecen casas de juguete, pero no, se puede entrar a vivir. La ideóloga de todo esto ha sido la geógrafa Lee Pera, de 37 años, que construyó una casa con 13 metros cuadrados. Cuando se la pregunte si no se siente incómoda con tan poco espacio, asegura que no, que está liberada pues tiene más tiempo libre y una vida social más intensa. “Me encanta volver a casa por la tarde y sentarme en el porche, y también adoro tener un armario más pequeño. ¿No es genial no tener que pensar que opción ponerme?”. Visto así…pero no me acaba de convencer.
La casa está construida en el patio trasero de unos amigos, tiene un porche, sala de estar, cocina, baño y un “loft” con una cama de matrimonio. Pero claro, todo a escala reducida y todo en el mismo espacio. Este tipo de casa también está a la venta por internet, por 12.000 dólares se puede conseguir una de ellas aunque el mayor problema para la expansión del movimiento son las restricciones legales ya que las leyes estadounidenses prohíben que los residentes vivan en casas con pocos metros cuadrados.
La primera vez que vi algo relacionado con este tipo de casas fue en un reportaje llamado La tribu de los Tiny houses (casas diminutas) que apareció en Netflix y en el “reality” ShowTiny House Nation, pequeñas casas de entre 13 metros cuadrados y 37 metros cuadrados. Y pensé, tiene que ser una broma, pero luego al buscarlo por internet he comprobado que no, que estamos ante un caso verídico.
Yo la verdad es que me sigo quedando con mi casa de 100 metros cuadrados que después de una reforma en el tejado ha quedado de lujo. Mientras tanto la señora Lee Pera, que siga a lo suyo. Y es que si yo me pongo en contacto con Cubiertas Estévez y les digo que quiero una reforma de tejado para unos…12 metros cuadrados, supongo que lo primero pensarían que se trata de una broma.
Ahora bien, quien tenga claustrofobia que se abstenga de ir a visitarla, porque puede salir para ser ingresado directamente. Y claro, eso de hacer una familia numerosa está prohibido, de ahí que se venda como ideales para estudiantes, o mejor dicho para un estudiante, y que no tenga muchos apuntes ni libros que meter en casa.